domingo, 13 de septiembre de 2009

Canon


Estamos en la Edad Media. El CONDE y la CONDESA, sentados en sus tronos, reciben a su CONSELLER de finanzas.

 

CONSELLER

(Haciendo una reverencia) ¿Me habéis mandado llamar, señor?

CONDE

Se me ha ocurrido un nuevo impuesto.

CONSELLER

Decidme.

CONDE

Impuesto regional por llevar sandalias.

CONSELLER

(Respetuoso) Señor, me permito decirle que ya tenemos un impuesto provincial por llevar los calcetines bajados y una tasa especial por llevarlos subidos.

CONDESA

(Puta) ¿Qué os pasa, Conseller? ¿Demasiado trabajo?

CONSELLER

Sólo quiero decir que su Excelencia debería aflojar un poco la mano de hierro. La gente empieza a murmurar.

CONDE

Eso no es cierto. La gente ríe y canta por las calles.

CONSELLER

Es por el impuesto de tristeza. Nadie quiere pagarlo.

CONDESA

¿Queréis decir que los plebeyos no pagan absolutamente nada cada vez que ríen o cantan?

CONSELLER

Eso es.

CONDESA

Pues que paguen, inepto.

CONSELLER

Pero eso es imposible. Necesitaríamos miles de Inspectores vigilando a los plebeyos por las calles, los mercados, las plazas...

CONDE

Reclutad más funcionarios. Nombrad inspectores a los soldados. Y soldados a los plebeyos. Y plebeyos a... (cambiando de tercio)¡moveos, holgazán!

CONSELLER

  Pero, señor, aún así la gente cantaría escondida en las letrinas, reiría en los establos, debajo de las sábanas mientras yacieran,... susurraría estribillos al oído de otros plebeyos,..

CONDESA

Pues aplicad un impuesto general de risas y canciones. Que pague todo el mundo.

CONSELLER

Señora, este impuesto se contradice con el de tristeza. La gente no sabrá si reír o llorar. Si ríen pagan, si lloran tamb.... (entendiendo la genialidad del nuevo impuesto) Oh, entiendo. Genial, excelencia, genial. (Y se dispone a marcharse)

CONDE

Conseller, ¿donde vais? ¿Qué está pasando con vuestra sagacidad?

CONSELLER

¿Qué queréis decir?

CONDESA

¿No hemos quedado en que la gente dudará entre reír o llorar?

CONSELLER

(Volviendo a caer en la cuenta y reaccionando con profesionalidad) Mañana mismo estableceré un Canon Dubitativo.

CONDE

Hoy, ¡holgazán!

Y el CONSELLER se retira.