lunes, 9 de noviembre de 2009

Órbita


Estamos en un avión en pleno vuelo. El pasaje está tranquilo. Al cabo de un instante aparece la AZAFATA y se dirige a los pasajeros a través de la megafonía.

 

AZAFATA

Buenas tardes, les habla la Auxiliar de Vuelo María Celeste.

A ver, cómo les explicaría yo..

Sí, que al piloto se le ha ido la mano cogiendo altura y ahora resulta que estamos en órbita y no podemos volver a la Tierra hasta dentro de cuatro años.

¿Alguna pregunta?

 

Nadie tiene preguntas, tal es su perplejidad.

 

AZAFATA

(Indignada)

Nadie quiere preguntar nada.

O sea, llevan todo el viaje haciéndome preguntas idiotas: que si tengo una mantita, que si voy a repartir la prensa, que si hay película,.. ¿y ahora nada?

 

La AZAFATA hace una pausa para ver si alguien se decide a preguntar algo. Nada. Se han quedado estupefactos.

 

AZAFATA

(Muy molesta) 

Vamos a ver: Acabo de decir que estamos en órbita. Lo más seguro es que choquemos enseguida con algún satélite y explotemos en mil pedazos de colores brillantes. ¿Y nadie dice nada?

 

Nada. Siguen estupefactos.

 

AZAFATA

¿Pues sabéis lo que os digo? Que iba a repartir la cena VIP con champán para todos, y gratis, pero ahora ni de coña. Eso faltaba.

 

La AZAFATA regresa a la cabina. Ahora el pasaje se amotina y se lanza en tromba hacia el compartimento de la AZAFATA, pues la cena VIP de esa línea aérea incluye una botella de Dom Perignon y una tarrina de Beluga de 60 gramos.